Tratados de Libre Comercio

En 2020 Perú llegó a ser el país más demandado por inversores extranjeros a nivel mundial

Al término de 2020, el Perú alcanzó a ser el país más demandado de todo el mundo ante los tribunales internacionales, debido al uso del mecanismo de solución de disputas inversor-Estado (conocido por sus siglas en inglés como ISDS), el cual está incluido en muchos de sus tratados bilaterales de inversión y acuerdos comerciales.

De acuerdo con los datos de la UNCTAD1, entre los años 2019 y 2020, Perú recibió nueve demandas por parte de sus inversores. Solo en 2020, y en plena crisis sanitaria, el Estado peruano recibió seis demandas de arbitraje internacional, además de cinco amenazas de posibles querellas en estas mismas instancias.

Es así que, hasta finales de diciembre del año pasado, nuestro país ha acumulado un total de 25 demandas, de las cuales, un 88% fueron interpuestas entre el 2010 y 2020. En relación a América Latina y el Caribe, Perú es el cuarto país más demandado. Le siguen Colombia con 6 casos, al igual que México, Panamá y Venezuela, con 5 casos cada uno.

Desde la década del 90, los diferentes gobiernos peruanos firmaron numerosos tratados bilaterales de inversión (TBI) que dieron a las empresas extranjeras, el “derecho exclusivo” de demandar al Perú ante tribunales de arbitraje internacional. De 2010 en adelante, se ha registrado un boom de demandas, cuya tendencia por año ha venido en aumento.

Deudas millonarias que limitan al Estado peruano

De sus veinticinco demandas acumuladas, el Perú tiene trece que aún están pendientes de resolver. Dentro de estas, y hasta el momento, existen dos órdenes de pago a favor de las empresas Bear Creek Mining (US$ 18.2 Millones) y Tza Yap Shum2 (US$ 780.000), que suman poco más de US$ 19 millones. Dicho monto serviría para adquirir más de un millón y medio de dosis de vacunas contra COVID-19 de la empresa Pfizer-Biontech.

Cabe resaltar que esta cifra millonaria no incluye los más de US$ 16.3 millones que el Perú debe asumir para pagar su propia defensa, los honorarios de los árbitros (se gane o se pierda el caso), e incluso el pago íntegro de los abogados que defienden a sus demandantes.

Los sectores más “demandantes”

Más de un tercio de todas las demandas contra Perú fueron registradas por inversores de Canadá y Estados Unidos, mientras que el 44% fue registrado por inversores europeos.

Si vemos las demandas por sectores, la industria extractiva en el Perú juega un rol económico importante y tiene amplia participación de empresas extranjeras. Ello explica que el 36% de todas las demandas contra Perú, han sido interpuestas desde el sector de minería e hidrocarburos. El sector Construcción es el que sigue con el mayor número de demandas: más del 25%.

Conclusiones sobre ISDS en Perú

Entre las recomendaciones del presente informe ISDS en números. El régimen de protección de inversiones y sus impactos en Perú, está el considerar la renegociación de los TLC para excluir el capítulo de protección de inversiones. Así como iniciar una revisión integral -a manera de auditoría, por ejemplo- de los acuerdos de protección de inversiones existentes, para ver si los beneficios planteados son realmente mayores que los perjuicios (análisis de costo/beneficio).

DATOS CLAVE:

  • Además de los 27 TBI, Perú tiene 13 Tratados de Libre Comercio (TLC) en vigencia que cuentan con un capítulo de protección de inversiones y habilitan el mecanismo ISDS (por sus siglas en inglés).
  • La cláusula de solución de disputas inversor-Estado o ISDS habilita a los inversores extranjeros a demandar al gobierno ante tribunales de arbitraje internacional cuando sienten que las medidas tomadas por el poder ejecutivo, legislativo o judicial, así como por gobiernos locales, afectaron negativamente sus ganancias. 
  • En todo el mundo, los tribunales que se basan en el mecanismo inversor-Estado han garantizado ganancias multimillonarias a las empresas transnacionales a costa del interés público.
  • Para descargar el informe, puede ingresar a: http://redge.org.pe/ISDS_en_numeros_el_regimen_de_proteccion_de_inversiones_y_sus_impactos_en_el_Peru

 

infográfico ISDS Perú

 

1.        Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo.
2.        Tza Yap Shum v. Republic of Peru (ICSID Case No. ARB/07/6), CENTRO INTERNACIONAL DE ARREGLO DE DIFERENCIAS RELATIVAS A INVERSIONES. https://icsid.worldbank.org/cases/case-database/case-detail?CaseNo=ARB/07/6
Fecha

Comercio exterior: piden respeto a los TLC bajo evaluación social

Impulso. Expertos proponen recuperar las exportaciones con valor agregado en el menor tiempo posible, pero sin dejar de lado las demandas de la sociedad.
Perú participa dentro del comercio internacional desde la década de 1990. Para lograr su consolidación se decidió negociar acuerdos comerciales con los países a los que más vendía. Fue así que, en 2003, Perú y EEUU firmaron el primer Tratado de Libre Comercio (TLC), el cual recién se implementó durante el segundo alanismo, en 2009.

Nuestro país cuenta en la actualidad con 21 contratos mercantiles vigentes, tras sumarse Australia en febrero del 2020. Nuestros principales socios comerciales son China y EEUU.

En el último lustro, de acuerdo con información de ADEX Data Trade, China lideró el cuadro de exportaciones, con una suma superior a los US$ 58.000 millones y se consolidó como nuestro primer socio mercantil. En el segundo lugar, encontramos a los EEUU, cuya suma de transacciones ascendieron a más de US$ 33.000 millones en el mismo periodo.

Por otro lado, aún hay pactos que no entran en vigencia, pero ya recibieron el visto bueno del Parlamento; tal es el caso del Reino Unido. Y el Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico (CPTPP) inició en marzo los trámites para su ratificación legislativa.

Asimismo, las negociaciones de un convenio con la India continúan. No obstante, aun sin ninguna alianza de por medio, los términos de intercambio a dicha nación empujan más de US$ 8.000 millones.

Hablan los candidatos
En cuanto al comercio exterior, los candidatos presidenciales Keiko Fujimori y Pedro Castillo muestran ciertas discrepancias.

Fujimori Higuchi consideró las propuestas de la Cámara de Comercio de Lima (CCL), las cuales priorizan la promoción de productos e industrias mediante el apoyo a empresas competitivas bajo la supervisión de Promperú. Para ello, se evalúa integrar las actividades de promoción en el extranjero.

La iniciativa más ambiciosa se encuentra en la logística que, de acuerdo al texto, “busca corregir la distorsión originada ante la falta de planeación de un desarrollo del sector a través de un Plan Nacional de Desarrollo Logístico”.

Su contrincante, Pedro Castillo, plantea una revisión y publicación de los acuerdos internacionales como los TLC, Alianza del Pacífico (AP), Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP), entre otros, “por haber convertido al Perú en una colonia comercial para ser elementos intermediarios de sabotaje al desarrollo comercial de otras potencias económicas contraria a los intereses de EEUU”.

Garantizar la estabilidad
De acuerdo con el extitular del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) Edgar Vásquez, el contexto de la pandemia favorecerá a las transacciones globales en los próximos años, sobre todo, a partir del 2022.

“Esto permitirá que el próximo Gobierno tenga la oportunidad de implementar políticas que promocionen las exportaciones con valor agregado y de atracción de inversión. El Perú tiene que salir con agresividad a captar esas oportunidades”, sostuvo Vásquez a La República.

Por ello, el especialista plantea, como primer punto, medidas a corto plazo en aras de recuperar las exportaciones con valor agregado. “No hay que distraernos con el oasis de las cifras de enero y febrero, ya que estas se deben al rebote estadístico muy fuerte”, acotó.

En segundo lugar, Vásquez Vela consideró que el próximo régimen deberá garantizar estabilidad donde se respeten las reglas del juego en referencia a los tratados de libre comercio. “Los TLC han sido sumamente importantes para que la oferta exportable peruana ingrese a los mercados y, más bien, tenemos que introducir más medidas que nos permitan aprovechar más esas oportunidades”.

Vásquez agregó que se debe fortalecer el Mincetur y de Promperú sobre todo a sus oficinas con las sedes en el exterior. “Ese es un momento en que el presupuesto de promoción no tiene que recortarse, en las crisis es que la promoción internacional tiene que incrementarse; y así promover al máximo los productos y servicios de alto valor del Perú”.

Evaluar para continuar
Ana Romero Cano, coordinadora ejecutiva de la Red Peruana por una Globalización con Equidad (RedGE), resaltó que antes de la firma de un próximo TLC se debe tener una evaluación que incluya las preocupaciones de la sociedad civil como la revisión en temas de propiedad intelectual relacionados al acceso a medicamentos.

La especialista sostuvo que, pese a que los TLC han sido promovidos como una panacea a la economía, los resultados de estos no se reflejan en la realidad. “Esta insistencia de continuar firmando acuerdos comerciales que van más allá de ello sin revisarlos, sin evaluarlos, no contribuye realmente a nuestro país”.

La experta enfatizó que las consecuencias negativas de estos pactos se han concretado en las relaciones de trabajo y en el desdén por el medio ambiente.

“No se ha evidenciado en una mejora real en las condiciones laborales, ya hemos visto lo que sucede con la contratación temporal, la libertad sindical, negociación colectiva, entre otros. Y en el plano ambiental, en aras de la promoción de las inversiones, se ha debilitado la institucionalidad ambiental enormemente. Se exportan los mismos bienes con muy poco procesamiento y contenido tecnológico”, sentenció.

La importancia de las ferias internacionales
Para el extitular del Mincetur Edgar Vásquez, se debe seguir impulsando la participación de Perú en grandes eventos internacionales virtuales o presenciales en los próximos años, así como el impulsar grandes eventos como la Expoalimentaria.

“Este se tiene que desarrollar en el segundo semestre, al cual las instituciones peruanas deben apuntalar a desarrollar un evento de gran magnitud y que permita una recuperación más amplia de las exportaciones y por ende generar optimismo en el sector exportador”.

Esta feria se desarrolla hace 12 años con el fin de que la oferta exportadora alimentaria del país sea conocida por un mayor número de asistentes alrededor del mundo.

El dato
Exportación. Perú exporta productos tradicionales como el cobre, oro, zinc, harina de pescado. Y de los no tradicionales destacan las frutas como uvas, mangos, arándanos, además de productos textiles y pesqueros.

TLC1

 

TLC2

Fuente: La República (Economía. 26 de abril de 2021)

Fecha

ISDS en números. El régimen de protección de inversiones y sus impactos en Perú

Ubicación
Publicaciones y Biblioteca Virtual
Autor(es)
Bettina Müller y Cecilia Olivet

Este informe contiene una sistematización de estadísticas en base a un análisis de los casos inversor-Estado conocidos contra Perú hasta Diciembre de 2020. Perú cuenta con 27 Tratados Bilaterales de Inversión (TBI) vigentes.

América Latina Mejor Sin TLC. Conversando alrededor de la Plataforma y los TLC

creación plataforma

¡Basta de Tratados de Libre Comercio en América Latina!

Plataforma “América Latina mejor sin TLC”

Las plataformas nacionales y redes regionales que conformamos la Plataforma “América Latina mejor sin Tratados de Libre Comercio” rechazamos el avance de la negociación y firma de más TLC y decimos, ¡25 años de libre comercio son suficientes! Conocemos perfectamente los efectos nefastos de los TLC porque los sufrimos cotidianamente, porque vemos cómo afectan nuestros campos, nuestro consumo, nuestra salud, nuestra vida y nuestro planeta. Somos las organizaciones sindicales, campesinas, de pueblos indígenas, de mujeres, ambientalistas, defensoras de los derechos humanos, del derecho a la salud, a la educación, a la vivienda, y a un medioambiente sano. Nuestra apuesta es por la construcción de prácticas económicas y políticas alternativas, por avanzar hacia los otros mundos que queremos y necesitamos.

Desde hace 25 años se han negociado y firmado en las Américas decenas de TLC y Tratados Bilaterales de Inversión (TBI). Las consecuencias de estos tratados han sido evidentes para los pueblos americanos: aumentaron el poder de las empresas transnacionales en la región, redujeron aranceles, abrieron mercados, blindaron la privatización de los servicios públicos, encarecieron los medicamentos a través de monopolios y restringieron los genéricos mediante nuevos mecanismos regulatorios, facilitaron la introducción de los agrotóxicos en los campos, favorecieron el desmonte, profundizaron el daño ambiental, precarizaron el empleo (que afecta especialmente a mujeres y migrantes), y otorgaron privilegios a los inversores extranjeros por sobre las y los ciudadanos. Estos son sólo algunos de los efectos negativos de estos Tratados sobre los pueblos. 

Dijimos No al ALCA, ¡hoy decimos No a todos los TLC!

Hace más de 10 años nos opusimos al Área de Libre Comercio de las Américas (ALCA) porque entendimos que ese Tratado era la herramienta legal de los grupos de capital más concentrado del continente que empujaban por la apertura y la privatización indiscriminada en nuestros países. Hoy los nuevos TLC van en el mismo camino que el ALCA. Contienen los mismos capítulos y disposiciones: Servicios, Contratación Pública, Telecomunicaciones, Propiedad Intelectual, Inversiones (que contiene el mecanismo de solución de controversias inversor-Estado), junto con otros temas nuevos pero que juegan a favor de las grandes empresas, como el Comercio Electrónico, la Coherencia Regulatoria y los Obstáculos Técnicos al Comercio. Todos estos temas están presentes en los TLC que negocian y firman nuestros países con EEUU y con la Unión Europea, así como con China y los países del sudeste asiático, como el Tratado Transpacífico (TPP-11). Pero estos temas también están presentes en todos los nuevos TLC intrarregionales, como los que se negocian actualmente en la llamada convergencia de la Alianza del Pacífico y el Mercosur.  

Entonces, los TLC no sólo incluyen temas de rebajas de aranceles, es decir, temas sobre comercio. Actualmente, el comercio intrarregional latinoamericano está liberalizado ya en un 95%, de acuerdo a datos del BID. Entonces, ¿por qué desde los gobiernos sostienen que necesitamos TLC si ya no se negocian aranceles y tarifas? Los nuevos TLC impulsados por los gobiernos, a servicio de las empresas transnacionales, poseen los temas “detrás de las fronteras” que intervienen en los mecanismos de toma de decisiones de los Estados. Un ejemplo claro es el mecanismo de Coherencia Regulatoria, que implica la compatibilización y homogeneización de las legislaciones internas de los países, e incluye el diálogo con las “partes interesadas” del sector privado. Los Estados deben facilitar al máximo la circulación de las inversiones y mercancías, pero no de las personas. Entonces, quien verdaderamente gana con estos TLC son las empresas transnacionales y los capitales más concentrados, mientras pierden los pueblos, los trabajadores y trabajadoras, la ciudadanía entera. 

Estos temas regulatorios implican privilegios extraordinarios para las empresas transnacionales y los inversores extranjeros. 25 años de TLC, además de los tratados bilaterales de inversión, nos dan sobrada evidencia de lo asimétricos que son los derechos de inversores y Estados. Los derechos de los inversores se convierten en el nuevo estándar para la legislación, mientras se socava la aplicación de los derechos humanos y medioambientales, disposiciones que pasan a ser “ley blanda” (soft law) frente a las prerrogativas privadas. Las empresas e inversores han usado estos instrumentos para demandar masivamente a nuestros países en los tribunales de arbitraje internacional (como el CIADI), mientras que los Estados sólo pueden llevar a una empresa por violación de derechos humanos o medioambientales a los propios tribunales nacionales, que luego son acusados de parciales y poco objetivos. Por ello, rechazamos los TLC y los TBI que no permiten que los Estados establezcan requisitos de desempeño para los inversores extranjeros, así como nos sumamos a la campaña global por un Tratado Vinculante sobre Empresas Transnacionales (ETN) y otras empresas con respecto a los derechos humanos que se discute actualmente en el marco de la Organización de las Naciones Unidas. 

¡Basta de acuerdos comerciales a espaldas de los pueblos!

25 años no han cambiado el modo en que se da tratamiento a todos los TLC en la región: negociación, firma y ratificación de tratados a espaldas de la ciudadanía y sin estudios de impacto que den cuenta de la supuesta necesidad de estos Tratados.

Los ciudadanos y las ciudadanas tenemos el derecho a participar en la formulación, implementación y evaluación de políticas sociales y económicas. Las metas centrales de estas políticas deberán ser la promoción de la soberanía económica, el bienestar social y la reducción de la inequidad en todos los niveles. Pero los TLC son acuerdos negociados y firmados con total falta de transparencia, aun si estos tienen impactos directos sobre la vida cotidiana de los pueblos de la región.

Por ello, exigimos que no se firmen más TLC, los cuales siempre son negociados sin estudios de impactos previos pertinentes, y sin consulta previa y de carácter vinculante a los grupos afectados. Exigimos la presentación de estudios que sean realizados por entes académicos autónomos e independientes a los gobiernos de turno, que evidencien los efectos sobre un amplio abanico de sectores sociales y económicos. Exigimos la realización de estudios y/o evaluaciones de impacto en derechos humanos, con fuentes transparentes que muestren dónde se obtuvo la información, haciendo una convocatoria amplia para la participación en dichos estudios. Asimismo, exigimos la aplicación del Convenio número 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), de la cual nuestros países son parte, y que sostiene que se debe consultar y hacer partícipe a los pueblos originarios en decisiones que afecten sus vidas y sus territorios ancestrales, por lo cual no se puede firmar más TLC sin realizar dicha consulta previa. 

Además, los 25 años de existencia de Tratados en la región imponen la necesidad de que se evalúen los impactos de los TLC y TBI vigentes, a través de la realización de Auditorías integrales ciudadanas independientes. Estas auditorías deben tener un carácter vinculante, que no permita que los gobiernos ignoren sus resultados, como fue el caso de la Comisión de Auditoría Integral de los Tratados de Inversión y del Sistema de Arbitraje (CAITISA) del Ecuador, que no tuvo carácter obligatorio para el Estado. Es necesario evaluar los impactos de los tratados existentes si se quiere avanzar hacia la construcción de marcos jurídicos para la inversión extranjera acordes al desarrollo sustentable y las necesidades de nuestros pueblos. 

Por todo esto rechazamos la estrategia de firma de más TLC y TBI. Dicha estrategia debería al menos ser puesta en cuestión, y rediscutirse a la luz de evidencias empíricas tras 25 años de tratados a nivel regional. En definitiva, no se puede seguir firmando tratados que privilegian los derechos de las corporaciones por sobre los derechos sociales y medioambientales, y que han generado impactos negativos para los pueblos de la región.

Desde la Plataforma “América Latina mejor sin TLC” trabajaremos de manera articulada por una integración desde los pueblos, una globalización para la justicia, la igualdad, la democracia, la paz y el cuidado del medio ambiente.

 

Firman:

Plataformas nacionales:

  • Argentina: Asamblea “Argentina mejor sin TLC”
  • Brasil: Rede Brasileira pela Integração dos Povos (REBRIP)
  • Chile: Plataforma “Chile mejor sin TLC”
  • Ecuador: “Ecuador Decide Mejor Sin TLC”.
  • México: Convergencia de Organizaciones Sociales y Ciudadanas “México Mejor Sin TLCs”.
  • Perú: RedGE – Red Peruana por una Globalización con Equidad.

Redes regionales:

  • ISP – Internacional de Servicios Públicos
  • Latindadd – Red Latinoamericana por Justicia Económica y Social.
  • CLATE – Confederación Latinoamericana y del Caribe de Trabajadores Estatales
  • ESNA – Encuentro Sindical Nuestra América
  • RedLAM – Red Latinoamericana por el Acceso a Medicamentos
  • Alianza LAC-Global por el Acceso a Medicamentos
  • Global Forest Coalition
  • Red de Género y Comercio
  • DAWN – Mujeres por un Desarrollo Alternativo para una Nueva Era
  • Comité para la Abolición de las Deudas Ilegítimas, Abya Yala – Nuestra América (CADTM Abya Yala)

Adhesión de organizaciones nacionales:

  • Fundación Solón, Bolivia

 

07 de mayo de 2019